ABEL BALLESTAS

ABEL BALLESTAS
Por David Escobar Gómez
Abel Ballestas, es el hijo de Romualdo Ballestas, un prestigioso ganadero y dirigente político de la población Plato, a quien el poder le permite mandarlo a la capital a estudiar.
Es tan alto su nivel social en el que se desenvuelve, que se enamoró locamente de la hija de un señor que llegó a ser presidente, Marco Fidel Suárez. Motivo que lo obligó a ir a su natal villa por la Fe de Bautismo para arreglar matrimonio con la dama de alcurnia.
No se sabe con certeza que pasó, pero Abel se enamoró ciegamente de una joven de menor condición y no regresó jamás a la gran ciudad. Su padre murió y lo que dejó en herencia, todo se lo bebió.
Arruinado, y de muy poca voluntad o que no se pudo adaptar a vivir de otra manera, no le quedó más que vivir de su intelectualidad. Componía versos y dictaba clases de castellano. A veces, por compasión, lo nombraban en la alcaldía en un cargo bajo. También se le veía cruzar el río para ir al pueblo vecino de Zambrano a hacer escrituras y cartas de amor, y casi siempre, lo que ganaba lo gastaba en ron.
Un día de esos, en Zambrano, se pasó de tragos y quedose dormido en un andén. Unos jóvenes, borrachos también, jugando con su honor, le derramaron clara de huevo en las nalgas parar que cuando se despertara creyera que había sido violado.
Más triste quedó Abel. Cual bestia herida arrastró su pena hasta llegar a su casa y quedó sumido en una gran depresión.
Sus amigos se enteraron de todo lo sucedido y fueron a animarlo para decirle lo que en verdad había acontecido, eso sí, ron de por medio, y lo lograron. Abel mejoró su estado de ánimo, pero a su rencor le puso letra, y compuso el siguiente verso:

ELEGIA A ZAMBRANO
Zambrano pueblo maldito,
pueblo vil y asqueroso,
paupérrimo y perezoso
que del mapa estas proscripto

Por qué, por qué tan ufano
por dos casitas de teja
porque vendes ropa vieja
¿Te crees ricacho Zambrano?

Acaso porque vapores
llegan a tu triste puerto
y a camino te ha abierto
ante tus pueblos mayores

Porque Rojas sea sacristán
y Alarcón sea rezandero
te crees pueblo puñetero
¿Que tus hijos progresarán?

Confórmate con tu suerte
y ya no aspires a más
porque tú siempre serás
pueblo vil, asqueroso e inerte.
Abel Ballestas 1945
Esta poesía causó mucho revuelo en los dos pueblos desde cada orilla de los acontecimientos, desde luego: humillación y risa.
Fue tal la indignación de los zambraneros, que la primera vez que fue a ese pueblo después de la afrenta simulada, lo arrestaron por haberse atrevido a tan ofensiva rima.
. Cuando en Plato se enteraron, una comisión de plateños abogó por él, y por supuesto lo sacaron del cadalso.
Abel, hombre humilde y sencillo, es llevado en hombros por la calle principal de su pueblo natal en un recibimiento apoteósico de restauración o desagravio. Quien sabe cuantas poesías quedaron olvidadas para orgullo de los plateños; porque de Abel, del pobre profesor Abelito, no más quedó en el recuerdo su venganza poética del que pudo ser el yerno del Ejecutivo, y no la víctima de la infamia y la degustación alcohólica.